Utilice Pruebas aceleradas de vida útil para modelar el rendimiento del producto (por lo general, los tiempos de falla) en niveles extremos de tensión y extrapolar los resultados nuevamente a las condiciones de uso normal.
La meta de una prueba acelerada de vida útil es acelerar el proceso de falla para obtener información a tiempo sobre productos de larga duración. Los métodos de aceleración incluyen pruebas a temperaturas, voltaje y presión extremos, y así sucesivamente.
Por ejemplo, en condiciones normales, un microchip puede no fallar durante muchos años. Sin embargo, este mismo microchip presentará fallas en horas al someterlo a altas temperaturas. Con una prueba acelerada de vida útil, usted puede utilizar la información acerca de cuándo fallan los microchips a altas temperaturas para predecir cuándo pueden tener lugar las fallas en condiciones normales de operación.
Para realizar una prueba acelerada de vida útil, elija
.Si sus datos de respuesta son binarios (solo dos resultados posibles), en lugar de mediciones continuas de tiempo de falla (u otras unidades), utilice Análisis probit.