Complejidad es una medida de la magnitud de las complicaciones de un producto o servicio específico. Un proceso más complejo tiene más oportunidades. Una tarjeta de circuitos con 25 piezas y 48 puntos de soldadura es una tarjeta más compleja que una tarjeta con tan solo 12 piezas y 22 puntos de soldadura y por tanto tendrá más oportunidades. Aunque es difícil representar realmente la complejidad con exactitud, por lo general la complejidad puede estimarse de manera razonable con un conteo simple. Este conteo se conoce como conteo de oportunidades. El conteo de oportunidades para el primer caso es de 25 + 48 = 73 y para el segundo caso es de 12 + 22 = 34.